Zuri y Edu son una pareja de Gasteiztarras que en 2003 se lanzaron a una aventura que cambio su vida 180 grados: adquirieron una mágica casa en ruinas ubicada en el pintoresco pueblo alavés de Salinas de Añana para convertirla en un alojamiento rural que no deja indiferente a nadie que lo visita. Y es que los dos han puesto todo su cariño y esfuerzo para restaurar con sus manos cada piedra, cada viga y cada ventana de este refugio de campo donde rige el principio de vivir al máximo y en calma.
La casa ahora consta de tres apartamentos independientes, de una, dos y tres habitaciones respectivamente. Cada uno tiene su propio salón, cocina y jardín con barbacoa. En los interiores se han cuidado los acabados, las paletas de color y por supuesto el mobiliario y la iluminación para hacerte sentir en un ambiente auténticamente rural. En caso de ser un grupo amplio, de hasta 20 personas, podréis alquilar la casa entera y disfrutar de un amplio Txoco que inluye una cocina con supercomedor, zona de sofás y un proyector de cine para disfrutar todo juntos.
Una de las singularidades de la casa es su filosofía dog-friendly, ya que las mascotas son recibidas aquí como un huésped más. Y no sólo eso: también tendréis la oportunidad de compartir inquietudes y experiencias con la dueña de la casa, ya que es una genial educadora canina y una apasionada de la psicología de estos fieles compañeros de vida.
Servicios
Datos de interés
Modalidad
Reserva completa de cada apartamento. La casa ahora consta de tres apartamentos independientes, de una, dos y tres habitaciones respectivamente.
Capacidad
12-14 personas alquilando los tres apartamentos.
Apartamento 1. Una habitación.
Apartamento 2. Dos habitaciones.
Apartamento 3. Tres habitaciones.