El Valle Salado inicia la cosecha de la sal de la mano del cocinero alavés Iñaki Murua y de la cocinera Carolina Sánchez
El Valle Salado se encuentra en plena cosecha de la sal, una campaña inaugurada hoy mismo por el cocinero alavés Iñaki Murua, que junto al diputado general de Álava, Ramiro González, ha visitado las salinas que producen desde hace miles de años este preciado producto. De esta forma, la Fundación Valle Salado de Añana, responsable de la recuperación y puesta en valor de las salinas de Añana, reconoce una vez más a los cocineros que apuestan por los valores del producto local como la sal de Añana y por extensión, se convierten en embajadores del Valle Salado.
La de Murua es la historia de un profesional precoz que ha tenido una carrera meteórica hasta conseguir su primera estrella Michelin al año y medio de abrir el restaurante Ikaro en Logroño. Nacido en 1989 en Rioja Alavesa, estudió en la Escuela de Hostelería I.E.S. Camino de Santiago en Santo Domingo de la Calzada, una formación que complementó en el Basque Culinary Center, donde completó el Master en cocina, técnica y producto.
Sus comienzos le llevaron a su Laguardia natal, donde pasó por el Batzoki como camarero y cocinero y más tarde por el restaurante Amelibia, donde obtuvo los conocimientos prácticos para brillar en su paso por el restaurante de Martín Berasategui o el Azurmendi de Eneko Atxa. Las cocinas del restaurante Venta Moncalvillo de La Rioja y del Hotel Viura en Villabuena le sirvieron de trampolín antes de abrir su primer restaurante propio junto a su pareja, también cocinera Carolina Sánchez, con la que comparte el mérito de alcanzar la constelación Michelin.
